Para Camila.

Los vientos atroces me enseñaron
que la dicha esta presente
hasta en la migaja mas envenenada,
que donde hubo odio alguna vez
disfrutamos del afecto
y rondamos juntos saboreando el ácido de la vida.

Siempre se acerca intolerante y arribista
el poder del desamparo
arribando en nuestras mejillas
queriendo reinar en nuestras vidas
tan desastroso y agonizante,
tan horrorosamente despreciable
pero vida mía , a los ojos te diré
que me gustas como a nadie
y que donde hay mierda por montón
también hay amor.

No deja de ser impresionante
cada parte de la consciencia
una contra otra
sangrando irreprochable
al querer ganar en este cuerpo
que danza  cada melodía
en el camino que nos impregna de brillantina.

Te digo, eres  alucinante en la multitud
quieres ser alegre después de la muerte
rendida ante ti misma
transporte del rencor irremediable
deslumbrante en el momento
razonable frente al problema
sensual por naturaleza
ninfomana tras el telón
Infantil entre arrebatos
una vil y cruel muñeca
te ahogas de afecto y aun quieres mas
admiradora de la belleza artificial
repugnante en casa
femenina, menos fina
depresiva,por la simpleza de ser una reina.